Si queremos tener unos dientes sanos y bonitos, la primera regla de oro es empezar por un correcto cepillado dental.
Hacemos un repaso por los errores más comunes a la hora de cepillarnos los dientes.
· No usar un cepillo dental adecuado. Los cepillos con filamentos duros pueden dañar el esmalte o la encía además de un cepillado agresivo.
o Para encías en buen estado, cepillo de dureza media.
o Para problemas de encías o esmalte dental, cepillo con cerdas suaves
o El cepillo se debe cambiar cada tres o cuatro meses. En cualquier caso, cuando los filamentos se hayan abierto en exceso.
o En cuanto a cepillo manual o eléctrico, lo importante es que el cepillado sea correcto.
o Usar el cepillo en seco, no mojarlo, y secarlo después de la limpieza.
· ¡Ojo! Algunos remedios caseros para conseguir unos dientes más blancos como el bicarbonato pueden afectar al esmalte de tus dientes.
· Usar la pasta dental adecuada
o Para dientes son sensibilidad, dentífrico con citrato de potasio, cloruro de estroncio, cloruro de estroncio o arginina.
o Para dientes sanos o con caries, dentífrico con flúor.
o Para encías que sangran, dentífrico con componentes antibacterianos (triclosán, clorhexidina) y extractos herbales (caléndula, equinácea). Usarlas por un periodo máximo de tres semanas para que no afecte a la microflora bucal
· No te olvides limpiar tu lengua, pues es un gran foco de bacterias.
· Los colutorios o flúor específicos para tratar patologías deben usarse solo bajo la recomendación de un odontólogo.
· Cuando pongas la pasta de diente en el cepillo no es necesario mojarla antes de lavarte los dientes. Así evitaremos que se pierdan las propiedades que nos aportan a los dientes.
· Un cepillo, una persona. Es de lógica. Nada de compartir cepillos de dientes, podrían ser transmisores de bacterias.
TU CEPILLO DE DIENTES PODRÍA TENER BACTERIAS… HASTA 10 MILLONES DE BACTERIAS NI MÁS NI MENOS.
Puesto que nos cepillamos en el baño, este entorno se convierte en el ambiente ideal para que las bacterias se desarrollen. Cada vez que tiramos de la cadena del inodoro, las bacterias fecales pasan al aire quedando "retenidas" en el cepillo. Cuanto peor ventilación tenga el baño más altas son las probabilidades de contaminación.
Otra forma de contaminación se produce por nuestra propia boca que puede contagiar una larga lista de microorganismos y gérmenes de todo tipo. Para evitar que el cepillo se llene de bacterias indeseadas es necesario crear una serie de hábitos que a la larga se conviertan en acciones repetitivas y automáticas.
CONSEJOS PARA MANTENER TU CEPILLO DE DIENTES SIN BACTERIAS
· Tirar de la cadena del inodoro con la tapa cerrada.
· Lavarnos las manos después de usar el inodoro con agua tibia y jabón.
· Lavar el cepillo de dientes con agua caliente y sacudirlo bien hasta que se seque.
· Sumergirlo en un enjuague bucal anti-bacteriano durante unos segundos para tener un cepillo sin bacterias.
· Mantener el cepillo en un envase individual, ya que cuando todos los cepillos están juntos en el mismo recipiente, si uno está infectado, contagiará a los demás.
· Cambiar de cepillo después de padecer alguna enfermedad.
· Reemplazarlos cada tres meses aproximadamente.
¿Y SI LE PONEMOS LA TAPA AL CEPILLO NO BASTARÁ?
No evitaremos el contagio, de hecho, poniendo tapa al cepillo no dejamos que las cerdas se sequen bien y esa humedad que queda en el cepillo se convierte en un caldo de cultivo bacteriano.
Esperamos que pongas esos consejos en práctica para tener un cepillo limpio y desinfectado. Así podrás mantener una excelente salud bucodental.
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