Corregir una mala posición de los dientes es cuestión de salud, no solo de estética. Por ello la ortodoncia es uno de los tratamientos dentales más demandados a la hora de solucionar problemas de maloclusión.
En función del estado de tu salud bucodental hay varios tipos de ortodoncia, aunque sin duda la ortodoncia invisible (o invisaling) es la más demandada hoy en día por su comodidad, su rapidez en el tratamiento y su fácil higiene, ya que se diseñan unos alineadores a medida de su boca totalmente invisibles. La ortodoncia, además de corregir la alineación y posición de tus dientes, tiene unos beneficios adicionales que quizás no conozcas y que compartimos contigo.
1. Mejora la respiración nasal.
En niños contribuye a un desarrollo armonioso de la cara.
Mejora el filtro del aire a los pulmones.
Al respirar mejor se mejora la calidad del sueño.
2. Mejora la masticación.
Contribuye a una mejor digestión de alimentos.
Ofrece una prevención del desgaste dental.
Previene los problemas de la Articulación Temporomandibular (ATM).
3. Protege los dientes.
Evita fractura dentales.
Facilita un correcto cepillado dental.
4. Contribuye al bienestar.
Aumenta la autoestima, una sonrisa bonita es uno de los factores que transmite más seguridad y confianza.
Contribuye a mejorar las relaciones interpersonales.
¿QUÉ TIPO DE ORTODONCIA ES MEJOR PARA MÍ? El tipo de ortodoncia que más se adapte a tu necesidad depende directamente del estado actual de tu salud dental. Será la ortodoncista la encargada de conocer y comprender tus expectativas, dificultades y motivaciones para que el tratamiento sea lo más eficiente posible y de acuerdo a tus necesidades.
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